El diseño organizacional como fuente de competitividad



Es por todos reconocido que el mundo y el mercado actual cambian constantemente. Los avances tecnológicos nos llevan a tener una constante aparición de nuevos productos, formas de distribución y modelos de negocio que cambian las reglas de la competencia. Lo que antes generaba ventajas competitivas para los grandes corporativos se ha perdido dada la democratización de la tecnología y las fuerzas de la globalización.

Estos cambios en las condiciones del entorno han cambiado el foco de las empresas y se han dado cuenta que una de las principales ventajas competitivas está en la capacidad de la estructura organizacional. Es decir, la forma particular en la que ésta es capaz de conseguir los objetivos estratégicos que se plantea.

Para conocer más:  La cultura organizacional, la base de tu estrategia de negocios


Pero, ¿qué es el diseño organizacional? 

Lo podemos definir como un proceso de construcción y ajuste de la estructura de la organización para conseguir sus objetivos. El proceso parte de la definición de las metas que tiene la empresa, convirtiendo éstas en tareas que, a su vez, sirven de base para la definición de los puestos de trabajo. Los puestos de trabajo se conectan para formar departamentos, y estos se enlazan para formar la estructura organizacional.


Importancia del diseño organizacional en la estrategia

Si su empresa fuera un equipo de fútbol, el diseño organizacional es la manera en que se va a parar el equipo para ejecutar la estrategia. Si lo que busca es meter goles y mete a más defensas, es probable que su estrategia no llegue al objetivo.
Así es que, cuando el proceso de diseño se realiza de manera efectiva, se pueden tener beneficios como:
  • Facilitar las actividades de la empresa.
  • Incentivar la innovación.
  • Desarrollar el talento humano.
  • Extraer lo mejor de cada persona.
  • Proporcionar claridad a los grupos de interés.
En la actualidad, los diseños organizacionales son procesos continuos y permanentes de la empresa. Alguna vez un cliente nos cuestionaba de por qué tenía que revisar su estructura si desde que había fundado su empresa hace 5 años, así le funcionaba bien. Y puede ser que en parte esto sea verdad, pero la dinámica de cambio constante que vive el entorno nos obliga a revisar continuamente nuestras estrategias y los vehículos que usamos para ejecutarlas.


¿Cómo empezar a revisar el diseño de tu organización?

Para empezar un proceso apropiado de diseño de su estructura organizacional, los directivos necesitan responder a las siguientes preguntas:
  1. ¿En qué grado están subdivididas las tareas en distintos trabajos?
  2. ¿Sobre qué fundamento se agruparán juntos los trabajos?
  3. ¿A quién deben responder los individuos y los grupos de trabajo?
  4. ¿Cuántos individuos puede un directivo gestionar de forma efectiva y eficiente?
  5. ¿Dónde recae la autoridad para la toma de decisiones?
  6. ¿Hasta qué nivel habrá reglas y regulaciones para dirigir a empleados y directivos?

Podemos resumir en que el tipo de estructura que tendrá una organización estará determinado por una serie de variables conceptuales, como su estrategia y objetivos, tamaño, tecnología y entorno en el que opera.

Generalmente los procesos de diseño estructural requieren de la presencia de un facilitador. El papel del facilitador es el de asegurar que se sigue un proceso sistemático y el de promover el pensamiento creativo.

Te invitamos a que revises tu estructura y analices si ésta es la adecuada para cumplir con la estrategia que se han propuesto y alcanzar los objetivos que se hayan trazado. Si no es así, en Evolucione podemos ayudarte a revisarla y trabajar en la adecuación de la misma.

Por: Equipo Editorial Evolucione







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